El Rolfing, marca patentada

Quizás existan tantas maneras de dar masajes como masajistas o personas dispuestas a dar un masaje hay en el mundo, pero hay una serie de escuelas que, de un modo u otro, han marcado unas directrices generales para realizar los masajes de una manera determinada. Estas escuelas de masaje se han centrado fundamentalmente en mejorar las prácticas y técnicas del masaje terapéutico, pero dentro de ellas siempre podemos encontrar consejos y recomendaciones sobre el modo de masajear que podemos aplicar a la hora de realizar nuestros masajes eróticos o en el momento de conseguir que el cuerpo de la persona a la que tenemos que masajear eróticamente consiga relajarse para, así, disfrutar más y mejor de la parte erótica de nuestros masaje.

Una de esas escuelas practica el llamado masaje de Rolf o método Rolfing. Rolfing es la marca comercial con la que ha sido patentado este tipo de masaje. El nombre le viene a la misma de Ida Rolf, una bioquímica neoyorquina nacida en 1896 y a la que se considera creadora del sistema de masaje o terapia manual conocida como la Integración Estructural.

La base teórica sobre la que se sustenta este método de masaje es el concebir que nuestro malestar físico y emocional proviene de un punto o raíz que se encuentra en nuestros tejidos conjuntivos internos y en la relación de los ese punto o raíz con el campo gravitacional terrestre. Según las teorías de Rolf, para cada persona existe una alineación más natural y particular entre ella y la gravedad. Si esta correcta y natural alineación se pierde, se provoca una tensión que deriva en malestar. La corrección de esta desalineación sería, fundamentalmente, la tarea a desarrollar por el masaje de Rolf o Rolfing.

Para comprender el trabajo que sobre el organismo realiza el masaje de Rolf hay que entender lo que es la fascia y qué funciones desempeña en el organismo. Los órganos internos del cuerpo humano están envueltos por un tejido conjuntivo. Este tejido conjuntivo es la fascia. Él es el encargado de unir la estructura interna y de organizarla en unidades de funcionamiento individuales.

La fascia no es una estructura fija e inamovible. La fascia se adapta constantemente y se adapta constantemente para responder a las demandas del cuerpo humano. Toda lesión provoca que la fascia reaccione y esa reacción, en ocasiones, provoca que se altere la postura del lesionado y su manera natural de moverse. Recuperar esa postura y corregir los patrones de movimiento negativos y antinaturales es la función primordial del Rolfing. Dicha corrección acostumbra a revertir en una completa transformación del aspecto físico del cuerpo y, a la larga, en una mejora de la calidad de vida. Más energía, una mayor sensación de bienestar y una mayor apertura hacia los demás son, entre otros, algunos de los beneficios que puede aportar para un masajeado un masaje de Rolf.

Los grandes defensores de este tipo de masaje hablan de cambios psicológicos importantes y positivos derivados de la realización del masaje de Rolf, así como de la idoneidad del Rolfing para mejorar el rendimiento de atletas y bailarines.

¿Cómo hacer un masaje de Rolf?

¿Cómo se realiza un correcto masaje de Rolf? La técnica más importante de realización de este tipo de masaje se fundamenta en la utilización de una presión fuerte y concentrada en un punto determinado del cuerpo. Esa presión suele realizarse con los nudillos, el codo y, en ocasiones, con el puño. Esto provoca que, durante la realización del Rolfing, se produzca una alternancia de sensaciones. De tanto en tanto es inevitable sentir un dolor agudo. Pero ese dolor agudo viene, comúnmente, acompañado de una estimulación especial. Es un dolor soportable y muy puntual que dura dos o tres segundos y tras el que acostumbra a sentirse una placentera sensación de excitación. Esto provoca que, en más de una ocasión, durante la realización del masaje de Rolf, se liberen fuertes emociones.

El masaje de Rolf puede ser muy apropiado para cualquier tipo de meditación y para combinarlo con disciplinas físicas como el Tai Chi, el Yoga o el Pilates. Una vez aplicado, y suficientemente relajada la persona que ha recibido el masaje, el masajista ya puede regalar un completo y sensual masaje erótico. Seguramente los efectos de éste serán más intensos y el placer experimentado por la persona masajeada, mayor.