La conexión de los chakras, un objetivo del Tantra

Cuando los chakras están equilibrados y alineados y girando juntos, la electricidad sexual que se genera en nuestro cuerpo es muy elevada. Piensa que, aunque estés satisfecho con tu vida sexual, es muy probable que mejore más todavía si trabajas tus chakras de manera adecuada. Gracias a ese trabajo, encontrarás que la comunicación se hace más fácil, que tendrás más intimidad y que tanto tu pareja como tú (es fundamental que los dos compartáis la misma filosofía sobre el placer y la sexualidad) seréis más conscientes de la ternura y pasión necesaria para hacer de vuestra relación una fuente incesante de placer.

Puedes encontrar muchos métodos para realizar ese trabajo que armonice y equilibre tus chakras. En cuanto inicies tu viaje tántrico y te adentres y profundices en las técnicas de meditación, adquirirás el instrumental necesario para sentir más vivos y palpitantes tus chakras y, por tanto, para sentirte mucho mejor tanto físicamente en general como sexualmente en particular.

En ocasiones, las personas, cuando estamos inmersos en una relación, tenemos miedo de exponer demasiado. El miedo a mostrarnos excesivamente apasionados y enérgicos puede estar ahí, lastrando la relación. Eso hace que frenemos nuestros apetitos y deseos, lo que puede implicar que no extraigamos de nuestras relaciones todo el placer que podríamos obtener si nos dejáramos llevar por nuestros instintos. Liberar los chakras es, pues, fundamental para liberarnos de ese miedo y para permitirnos alcanzar ese estado en el que el placer fluye y nos invade sin obstáculos ni trabas.

Para que esa liberación de los chakras se produzca, es necesario que masajeemos los chakras que deseamos liberar. En este artículo os proponemos los consejos necesarios y básicos para que aprendáis a masajear el tercer y cuarto chakra.

Masaje del tercer chakra

El tercer chakra se encuentra en la parte inferior del abdomen. A menudo, los hombres (y en especial aquellos que más tienden a ocultar sus sentimientos) tienen este área corporal contraída. La rabia o la frustración acumuladas a lo largo de los años, así como el estrés, hacen que esa parte se endurezca de manera negativa. Si cuando contienes la respiración porque te sientes enojado o frustrado notas la tensión de esa zona, es porque tienes tu tercer chakra restringido y oprimido. Si es así, tu energía emocional y sexual estará también, tenlo por seguro, restringida.

Un masaje en esta zona puede borrar cualquier restricción y ayudará a despertar tu poder masculino. Puedes masajearte tú mismo esa zona o, mucho mejor aún, puedes solicitar a tu pareja un masaje abdominal. El modo idóneo de hacerlo será utilizando aceite de masaje y frotando el área que está en la parte inferior de la caja torácica realizando movimientos circulares con firmeza. Este masaje abdominal puede ser independiente de cualquier otro masaje o, por el contrario, puede formar parte de un masaje corporal completo.

Masajes para el segundo chakra

El segundo chakra está ligado a la emoción y la sensualidad. Es un chakra eminentemente femenino. Los hombres encontraréis que, después de estimular el segundo chakra, vuestra pareja estará mucho más relajada y abierta a la intimidad. Gracias a eso, las mujeres estarán dispuestas a recibir a su pareja de una manera mucho más profunda.

Para masajear este chakra deberás seguir el siguiente ritual:

  • 1. Haced el ritual namaste como forma de saludo.
  • 2. Pregúntale a tu compañera si desearía estar acostada y que tú la adorases. No importa que esté desnuda o vestida. Que esté, en cualquier caso, como ella se sienta más a gusto.
  • 3. Vierte un poco de aceite de masaje en tus manos y realiza un masaje abdominal siguiendo el sentido de las agujas del reloj, de una manera lenta y metódica, con la parte plana de las manos. De vez en cuando cambia las manos (crúzalas entre sí) y sigue realizando lo mismo que has hecho hasta ahora, de manera dulce, siempre con suavidad.
  • 4. Alienta a tu pareja a respirar con su vientre mientras le realizas el masaje, que tome conciencia de todo lo que estáis haciendo en ese momento, de cómo tus manos le están proporcionando ese placer que sólo puede proporcionar un buen masaje. Si hace eso, un gran amor y aprecio brotará de ella hacia tus manos.
  • 5. Al final del masaje, besa el vientre de tu pareja con suavidad y amor, lentamente, con dulzura. Piensa que lo importante es que ella se sienta querida y adorada.