vida sexual
El miedo al sexo
Aunque a bote pronto pueda parecernos extraño, se puede tener miedo al placer. Por tanto, se puede tener miedo al sexo. De hecho, hay muchas personas (más, sin duda, de las que nos creemos), que sienten algo parecido al pánico cuando deben mantener una relación sexual. ¿Los motivos? Pueden ser muchos.
Hombre y mujer tras el coito
Que hombres y mujeres vivimos la sexualidad de manera distinta es algo que ya sabemos. Nos une la búsqueda conjunta del placer, sí; pero una vez alcanzado éste, unos y otras nos comportamos de manera diferente. Ello no es fruto del azar ni de una determinación cultural: tiene un fundamento físico y una explicación científica. Aquí te explicamos por qué el hombre tiende a dormirse tras el coito o por qué la mujer, a veces, se siente embargada, en el post-coito, por una extraña tristeza.
El coregasm o el orgasmo por ejercicio físico
Hay estudios que lo demuestran: al orgasmo no sólo se llega por los caminos del sexo. Hay mujeres que han llegado a él trabajando como costureras, por ejemplo. Pero no sólo ese movimiento que la mujer realiza con la máquina de coser de doble pedal puede ser el responsable de que una mujer alcance el orgasmo fuera de la práctica sexual. También lo puede alcanzar haciendo abdominales. O practicando yoga. Algunas mujeres lo han hecho corriendo o montando en bicicleta.
¿En qué consiste el petting?
Sabemos que siempre te ha preocupado ponerte al día en materia sexual. Sabemos también que procuras informarte al máximo y que buceas en blogs y páginas webs de sexualidad a la búsqueda de la última novedad, juguete erótico, postura sexual o técnica amatoria que te permita, cada vez más, disfrutar de tu sexualidad. Y es precisamente porque sabemos todo eso por lo que damos por supuesto que ya te habrás dado cuenta de que, en muchas ocasiones, se utilizan vocablos ingleses para nombrar prácticas eróticas que no son nuevas. Eso sucede con el petting.
Feng Shui y sexo
Hay pocas cosas que estén relacionadas con el placer y el relax que no tengan una conexión más o menos directa con las diferentes culturas orientales. También la ocupación armónica del espacio ha sido a lo largo de los siglos una preocupación de las culturas orientales. Si los textos tántricos han señalado la influencia que el espacio en el que mantenemos las relaciones sexuales tiene sobre dichas relaciones, la cultura china se ha servido del Feng Shui, un antiguo sistema filosófico, para destacar la influencia que el espacio puede tener sobre las personas que lo ocupan.
¿De dónde viene el beso romántico?
En ocasiones damos por sentado que el beso romántico es la más importante muestra de amor de una persona hacia su pareja olvidando que el beso no es un acto que sea visto del mismo modo por todas las culturas del mundo. En algunas, incluso, se prohíbe y sanciona el beso en los labios.
Meditación y sexo
Concentración sexual La imagen la hemos visto en alguna que otra película japonesa o que desee plasmar…
El dildo doble
Si hay un juguete erótico que puede convertirse en una maravilla y en un camino garantizado hacia el placer tanto para parejas gays como para parejas lesbianas o heterosexuales ése es, sin duda, el dildo doble. Él puede permitir que dos hombres disfruten al unísono del sexo anal. Él puede hacer que dos mujeres disfruten al mismo tiempo de una penetración anal, vaginal o combinada. El dildo doble ofrece la posibilidad de que una pareja heterosexual pueda organizarse para disfrutar de un juguete para adultos tan versátil.
Sexo animal
La idea que se tiene del sexo tántrico acostumbra a girar en torno al eje de la tranquilidad. El sexo tántrico acostumbra a ser percibido como una actividad sosegada y tranquila, llena de rituales encaminados a ahondar en la conexión entre los miembros de la pareja. Pero el sexo tántrico puede tener, también, su lado salvaje. En el sexo tántrico también cabe el sexo animal, el sexo primitivo, el sexo en el que los miembros de la pareja se dejan ir y dejan que sus instintos salgan a la luz sin cortapisas ni barreras.
El coqueteo
El coqueteo, ese intento continuo de seducir al otro que siempre se da en las fases iniciales del amor, suele quedar arrumbado cuando la relación de la pareja se afianza y la rutina se apodera de la misma. La adulación, la risa, el tacto ligero y, sobre todo, el contacto visual, van perdiendo protagonismo en la relación. Recuperar el coqueteo es fundamental para insuflar nueva vida erótica a una relación que empiece a dar claras señas de empezar a marchitarse bajo la losa siempre aplastante de la rutina.
El huevo de jade
Las mujeres de la antigua China conocían los efectos beneficiosos que para la salud de la vagina tenían los ejercicios realizados con el huevo de jade. Gracias a dichos ejercicios, las cortesanas chinas conseguían fortalecer y tonificar sus músculos vaginales. Eso les permitía gozar mucho más de sus relaciones sexuales.