El siroabyangam

En su momento ya hablamos en este blog del masaje de la cabeza. El masaje craneal, apuntábamos en aquel post, permite obtener ese estado de relajación que nos permite gozar más y mejor de nuestras relaciones sexuales. Sin duda, el sexo se disfruta mucho más cuando se llega a él desde el relax que cuando se llega desde la tensión.

En esta ocasión vamos a proponerte un tipo de masaje de amplia tradición ayurvédica: el siroabyangam. Abyangam es un vocablo sánscrito que hace referencia a un masaje que se realiza con aceites curativos elaborados con plantas y hierbas y que tiene como finalidad estimular determinadas zonas del cuerpo en las que confluyan ligamentos, nervios, tendones, músculos y huesos.

Los Varmas de la cabeza

En la tradición ayurvédica esas zonas especiales de confluencia de tendones, músculos, nervios, ligamentos, etc. reciben el nombre de Varma. Una región corporal en la que se concentran varias de esas zonas es, precisamente, la cabeza (siro en sánscrito). Ahí, en la cabeza, encontramos seis Varmas:

  • Adhiti varma. Punto situado en la fontanela anterior, a ocho dedos del centro de las cejas.
  • Simata varma. Punto ubicado en la coronilla, cuatro dedos más atrás del adhiti varma.
  • Krakari varma. Con este nombre se conocen dos puntos situados en la parte posterior del cuello, a cada lado de la primera vértebra cervical, muy cercanos al bulbo raquídeo.
  • Vidura varma. Los Vidura varma son esas pequeñas depresiones que existen tras los lóbulos de las orejas.
  • Utkshepa varma. Son los puntos que están colocados en el borde superior de la hélice de las orejas.
  • Shanka varma. Colocados a ambos lados de la frente, los Shanka varma están ubicados en las sienes.

Será sobre estos seis Varma sobre los que actúe el siroabyangam, un masaje que puede proporcionarse uno mismo y que, como masaje específico de la cabeza, servirá para nutrir el sistema nervioso, refrescar la mente, mejorar los sentidos, eliminar todo tipo de toxinas (tanto físicas como mentales), incrementar el aporte de oxígeno a los tejidos y eliminar la tensión de hombros y cuello. El siroabyangam sirve, además, para curar problemas de migraña, dolor de cabeza e insomnio; ayuda al crecimiento del cabello, mejora el tono de la piel y desarrolla la memoria.

Por todos estos motivos hemos escogido el siroabyangam como técnica a auto-masaje que puede servirnos para comenzar el día cargados de energía y preparados para disfrutar de todo lo que la vida nos oferte, sobre todo si esa oferta tiene algo que ver con el placer.

¿Cómo se hace el auto-masaje craneal?

El siroabynagam o auto-masaje craneal debe ser realizado por la mañana, antes del baño. Para realizar este masaje debe utilizarse aceite de coco o de sándalo, es decir, un aceite que tenga propiedades refrescantes.

Tras verter unas gotas de aceite tibio sobre el Adhiti varma, la persona realizará, con la punta de los dedos, un masaje circular en sentido horario. Tras realizar varias vueltas, debe golpearse delicadamente sobre ese punto mientras, entonando el mantra “ommmmmm”, se esparcirá aceite sobre ambos lados de la cabeza con la mano.

El auto-masaje craneal continuará aplicando unas gotas de aceite en la coronilla o Simanta varma y actuando sobre ella de la misma manera que se ha actuado sobre la fontanela o Adhiti varma.

Con la punta de los dedos se irá masajeando dicha zona y se avanzará progresivamente hacia las sienes y hacia los Krakari varma, es decir, hacia las cervicales y hacia la zona en que se encuentra el bulbo raquídeo.

Tras masajear dicha zona, el auto-masaje craneal continuará haciendo avanzar los dedos hacia los puntos directamente relacionados con las orejas (Vidura varma y Utkshepa varma) y, de nuevo, las sienes.

Tras masajear de manera circular los seis puntos o Varmas indicados, peinaremos el cabello con la punta de los dedos tirando de él con la finalidad de levantar el cuero cabelludo. Esta tarea de peinado se realizará desde delante hacia atrás. Con ello conseguiremos aumentar el flujo de sangre y estimular el sistema nervioso.

Tras ello, friccionaremos con vigor el cuero cabelludo durante un tiempo aproximado de 5 minutos. Pasados esos cinco minutos, moveremos la cabeza hacia ambos lados en sentido circular. Tras ello, moveremos la cabeza hacia atrás y hacia delante lentamente y acomodando nuestras inspiraciones y expiraciones a dicho movimiento. Como sabemos por otros artículos editados en este blog, el control de la respiración es fundamental para conseguir la relajación. Un buen control de la respiración, además, permite una notable mejora de nuestras prestaciones sexuales.